Limpieza y mantenimiento de pieles de oveja

El mantenimiento y la limpieza de pieles/alfombras de piel de oveja y pieles de conejo requieren un cuidado suave para preservar su suavidad y apariencia. Aquí tienes una guía de cuidados tanto para las pieles de oveja como para las de conejo:

  1. Batido regular: Lleve su piel de oveja/conejo al aire libre y sacúdala bien para eliminar la suciedad y los residuos sueltos. Esto debe hacerse semanalmente o según sea necesario para evitar que la suciedad se deposite en las fibras.

  2. Limpieza de manchas: Si notas una pequeña mancha o derrame, actúa rápidamente. Seque el área con un paño limpio y húmedo, pero evite frotar, ya que puede empujar la mancha más profundamente en las fibras. Utilice un detergente suave específico para lana si es necesario, siguiendo las instrucciones del producto. Enjuague con agua limpia y seque.

  3. Limpieza profunda: Para una limpieza más profunda, puede lavar toda la piel de oveja/conejo. Utilice un detergente suave para lana o para mascotas, ya que los productos químicos agresivos pueden dañar los aceites naturales de la piel de oveja. Lave la alfombra a mano en agua tibia, agitándola suavemente. Enjuague bien con agua limpia hasta eliminar todo el jabón. Exprima el exceso de agua sin escurrir y remodele suavemente la alfombra. Déjelo secar al aire libre, lejos de la luz solar directa y de fuentes de calor. Una vez seca, esponja las fibras de lana con los dedos.

  4. Cepillado: Utilice un cepillo de cerdas suaves o un cepillo para mascotas para mantener la suavidad y esponjosidad de la lana. Cepilla en la dirección de las fibras naturales y hazlo suavemente para evitar dañar la piel de oveja.

  5. Evite la luz solar directa: La exposición prolongada a la luz solar directa puede provocar que la piel de oveja se desvanezca y se seque. Mantenga su alfombra alejada de la luz solar directa o use cortinas o persianas para filtrar la luz.

  6. Gire su alfombra: Para garantizar un desgaste uniforme, gire periódicamente la alfombra de piel de oveja para que se desgaste uniformemente en todas las áreas.

Limpieza y mantenimiento de pieles de conejos:

  1. Agitar y cepillar: Al igual que las alfombras de piel de oveja, las pieles de conejo deben agitarse periódicamente para eliminar el polvo y la suciedad. Utilice un cepillo de cerdas suaves para esponjar suavemente el pelaje y eliminar los enredos.

  2. Limpieza de manchas: Aborde las pequeñas manchas o derrames inmediatamente secando con un paño limpio y húmedo. Utilice un detergente suave y delicado si es necesario, pero evite saturar la piel. Enjuague con agua limpia y seque.

  3. Limpieza a vapor: Para refrescar y limpiar toda la piel del conejo, puedes utilizar un vaporizador de ropa de mano. Mantenga la vaporera a distancia y vaporice suavemente el pelaje, esponjandolo con los dedos. No mojes demasiado la piel. Esto es demasiado adecuado para pieles de oveja porque son demasiado gruesas.

  4. Evite la humedad excesiva: El pelaje del conejo es delicado y puede enredarse si se moja demasiado. Evite sumergir la piel en agua o exponerla a una humedad excesiva.

  5. Almacenamiento: Guarde las pieles de su conejo en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa, fuentes de calor y humedad. Puede utilizar una bolsa de ropa transpirable para protegerlos del polvo cuando no estén en uso.

  6. Rotar y volver a esponjar: Al igual que las alfombras de piel de oveja, rote y vuelva a esponjar periódicamente las pieles de conejo para garantizar un desgaste uniforme.

Recuerda que tanto la piel de oveja como la de conejo son materiales delicados, por lo que un cuidado suave es fundamental para mantener su suavidad y apariencia. Si sigue estas pautas de cuidado, podrá disfrutar de la belleza y la comodidad de sus alfombras y pieles durante muchos años.

Si su piel de oveja o conejo se empapa con la lluvia, es esencial tomar medidas inmediatas para evitar daños y asegurarse de que se seque correctamente. Esto es lo que debes hacer:

Para alfombras de piel de oveja:

  1. Sacuda el exceso de agua: Tan pronto como notes que la alfombra está mojada, sácala al aire libre y sacude suavemente la mayor cantidad de agua posible. Esto ayudará a evitar que la alfombra se sature demasiado.

  2. Secar con toallas: Coloque la alfombra de piel de oveja sobre una superficie limpia y seca, como una toalla o un piso limpio y seco en el interior. Use toallas limpias y secas para secar suavemente la superficie y absorber más humedad. Reemplace las toallas a medida que se humedezcan.

  3. Secar al aire: Una vez que haya eliminado la mayor cantidad de humedad posible mediante el secado, deje que la alfombra se seque al aire de forma natural en el interior. No lo expongas a la luz solar directa, a fuentes de calor ni utilices un secador de pelo, ya que el calor excesivo puede dañar el soporte de cuero y las fibras de lana. Asegure una ventilación adecuada en la habitación para ayudar en el proceso de secado.

  4. Remodelar suavemente: A medida que la alfombra se seque, dale forma suavemente a su forma original, esponjando las fibras de lana con los dedos. Tenga paciencia, ya que la alfombra puede tardar un tiempo en secarse por completo.

  5. Cepille después del secado: Después de que la alfombra esté completamente seca, use un cepillo de cerdas suaves para esponjar y restaurar la textura natural de la lana.

Para pieles de conejo:

  1. Sacuda el exceso de agua: Al igual que con las alfombras de piel de oveja, agite suavemente la piel del conejo para eliminar el exceso de agua.

  2. Secar con toallas: Coloque la piel sobre una superficie limpia y seca y use toallas limpias y secas para secarla suavemente. Reemplace las toallas a medida que se humedezcan.

  3. Secar al aire: Deje que la piel del conejo se seque al aire libre en el interior, lejos de la luz solar directa o de fuentes de calor. Utilice una percha o colóquelo sobre una rejilla para asegurar una circulación de aire adecuada. Evite colgarlo por sus delicados bordes, ya que esto podría estirar o dañar el pelaje.

  4. Esponjar el pelaje: Una vez que la piel esté casi seca, use los dedos para esponjarla y separarla para restaurar su apariencia natural.

  5. Cepille suavemente: Después de que la piel esté completamente seca, use un cepillo de cerdas suaves para esponjar suavemente y restaurar la textura del pelaje.

Recuerde tener paciencia durante el proceso de secado, ya que tanto la piel de oveja como la de conejo pueden tardar algún tiempo en secarse completamente. Evite el uso de fuentes de calor artificiales, ya que el calor excesivo puede dañar las fibras naturales. El pelaje correctamente secado debería recuperar su suavidad y apariencia sin ningún problema.

Si tiene alguna pregunta o necesita asesoramiento, no dude en ponerse en contacto.

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